Una regla de oro que debemos saber a la hora de vender una vivienda

En el momento de poner a la venta una vivienda, conocer el precio adecuado con el que sacarla al mercado es la duda más común a la que debemos hacer frente.

Por ello una vez fijado el precio, sea cual sea el método que hayamos untilizado para ello, se ha de cumplir la sieguiente regla. La regla de Oro para saber si el precio que hemos puesto es más o menos el correcto:

La clave está en que al menos siete posibles compradores soliciten visitar la vivienda en la primera semana de su anuncio. En el caso de que esto ocurra, es probable que el pecio sea el adecuado con respecto a la demanda del mercado.

Está estadísiticamente comprobado que para que una vivienda se venda en precio, relativamente pronto, se ha de cumplir que duranete la primera semana se produzca la visita de por lo menos siete compradores reales. No siete visitas cualesquiera, sino de siete compradores debidamente filtrados y que sean compradores reales. Si se produce esta circunstancia, lo más probable es que pasados esos diete días tengamos una oferta de compra muy cercana al precio de salida al mercado de la vivienda.

Si se cumple esta regla de oro, el 78% de estas propiedades se venden en el plazo de tres meses, mientras que, si no se cumple con este indicador, el porcentaje baja al 45%. En este segundo caso, las ventas suelen retrasarse hasta los seis meses.

La cuestión es la de siempre:

¿Cómo fijo el precio correcto para que se de la regla de Oro?

Siete recomendaciones clave

En busca de que los potenciales vendedores puedan fijar de forma correcta el precio de una vivienda, esta podría ser una lista definitiva  con siete recomendaciones que pueden facilitar tomar la decisión correcta.

1. Realizar un estudio de mercado, que te ayudará a conocer las tendencias de tu área para inmuebles comparables.
2. Elige las fotos de mayor calidad y describe la vivienda de forma detallada, siempre destacando las características más llamativas de la misma, como si tiene patio o terraza.
3. No debes dejarte llevar por el valor sentimental, que te puede hacer sobrevalorar el inmueble y, por tanto, inflar el precio.En el caso de que veas que la vivienda no recibe ofertas o visitas, deberás considerar.
4. Revisar y ajustar el precio. Aunque en su momento consideraras que este estaba lo suficientemente ajustado, el mercado puede cambiar y tienes que estar dispuesto a adaptarte.
5. La demanda del mercado también puede variar, por lo que debe evaluarse el momento en el que se encuentra el sector y tenerlo en cuenta a la hora de fijar un precio,A pesar de que fijes un coste inicial.
6. No puedes cerrarte en ningún caso a la negociación.
7. Es aconsejable consultar a un agente inmobiliario, ya que su experiencia en el área en el que se ubique la vivienda puede ser una información importante para orientarse. Además, también puede ayudarte a entender el mercado y, de esta forma, fijar un precio lógico y realista.